11 de febrero de 2011

BIENAVENTURADOS LOS PACIFICADORES…


Martin Stendal

“Bienaventurados los pacificadores; porque
ellos serán llamados hijos de Dios.”

A Jesús le gustaría valerse de todos y cada uno de nosotros para traer Su paz a los que nos rodean. Cuando entramos en el espíritu de las enseñanzas de Jesús, Su Espíritu Santo empieza a obrar en nuestra vida y empieza a sanar las relaciones que hemos roto con los que nos rodean.

Cuando cooperamos con el Rey Jesús, empezamos a encontrar que aun nuestros peores errores y fallas pueden cambiarse en algo positivo, si los admitimos sinceramente, sometiendo mansamente nuestras áreas problemáticas a Su control, y perdonamos misericordiosamente a los demás.

Si permitimos que el Espíritu Santo nos entrene para ser pacificadores, nos asombraremos al observar que nuestros errores y nuestras fallas se han hecho mucho más pequeños. A Dios le gustaría adoptarnos en seguida en Su propia familia y llamarnos Sus hijos siempre y cuando nos sometamos a Su autoridad y disciplina. Nuestro papel como pacificadores es ayudar a los que nos rodean a hacer la paz unos con otros y con Dios.

Rescate su Familia – Martin Stendal

No hay comentarios.:

Publicar un comentario