George Warnock
Cuando
llegamos a conocer al Señor un poco más, miramos atrás y nos asombramos de la
forma en que Él nos ha guiado y preparado nuestro camino, incluso antes de que
Le conociéramos o Le buscáramos. Mirando más adelante en la vida, nos damos
cuenta que ha habido tantas cosas incidentales o accidentales que nos han
sucedido y que el Señor estableció como una preparación necesaria para la
gracia que Él revelaría en días por venir. Con frecuencia, muchas cosas que
simplemente sucedieron, han probado ser totalmente providenciales. Cuando
nuestros corazones se vuelven hacia Él, sólo Dios en Su gracia y en Su misericordia sabe como tomar nuestras
faltas y correrías del pasado y hacer que se conviertan en los escalones hacia
la gloria. Debe haber sufrimiento por cada acto de desobediencia y de rebelión;
pero cuando Él vuelve nuestros corazones completamente hacia Él, descubrimos
que él ha estado preparando y disciplinando a Sus hijos para que Él pueda tener
un Huerto fructífero para su propio deleite.
Remover
los terrones puede ser una clase de trabajo inútil y sin objetivo aparente.
Pero el Labrador debe hacerlo si la tierra ha de recibir la semilla y la lluvia
que la haga germinar. ¿Por qué tenía que pasarme esto a mí? No lo sé, pero sí
sé que la tierra del corazón debe estar rota. Sólo el corazón contrito y
humillado puede recibir la semilla de verdad que germinará y echará raíz y florecerá. ¡Oh, si! Yo podría recibir la
verdad con un gozo fugaz cuando llegue a mi corazón intacto. ¡Pero Jesús nos
advierte que la tierra pedregosa recibe de hecho la palabra con gozo! Pero sólo
por un tiempo. Cuando las pruebas de la vida llegan, esa clase de gozo se seca
rápidamente... dejando con frecuencia al corazón seco y estéril. Tenemos todas
las razones para cuestionar cuánto realmente bueno se cumple con muchos de
nuestros programas de iglesia hoy día. Puede haber muchas “bendiciones”, y
mucho “gozo” artificial, pero no estamos hablando de eso. ¿Está Dios penetrando
en los corazones de Su pueblo? ¿Estamos satisfechos con el placer de sentirnos
bien, y todo el tiempo preocupándonos menos de que el Señor quite la amargura,
los sentimientos de endurecimiento contra Dios y nuestro hermano, y todas esas
operaciones de la mente carnal?
Venid,
rompamos nuestra tierra en barbecho; “Porque es
tiempo de buscar al SEÑOR hasta que venga a enseñaros justicia.” (Oseas 10:12).
Venid, rompamos el jarrón de alabastro a los pies de Jesús. Sometámonos bajo Su
mano poderosa, porque Él es el gran Labrador que anhela plantar una semilla
dentro de nosotros que reproduzca Su propia imagen, naturaleza y carácter.
Queremos ser como Jesús. Pero somos sólo la tierra, solo la suciedad de la
vieja creación. ¿Cómo podríamos ser como Él? Sólo recibiendo la Semilla de vida
dentro de nuestra pequeña tierra, y dejando que Él se reproduzca a Sí mismo en
toda Su gloriosa semejanza. Y entonces, de la tierra que somos brota nueva vida
desde Su mano creativa. Pablo dijo “que aunque nuestro hombre exterior va
decayendo, sin embargo nuestro hombre interior se renueva de día en día.” (2ª
Corintios 4:16).
El huerto de Dios - George Warnock
1 comentario:
Con las aflicciones de estos ultimos tiempos he sentido que mi Señor esta obrando en mi y que el tiene lista su semilla para sembrarla en mi corazon. A Dios gracias
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