Los Israelitas atravesaron el Jordán y se establecieron en la tierra prometida en su último campamento (Campamento No. 42) al final del éxodo, lo cual nos indica simbólicamente la libertad y conquista a la que esta llamada la iglesia al salir de la religión a una vida de libertad, en una relación directa, vital y real con Cristo Jesús; Cristo es símbolo de la tierra prometida y la herencia de los hijos de Dios.

La santidad es la obra del Espíritu Santo en nosotros, separándonos del amor del mundo. La santidad es un cambio de naturaleza desde dentro como resultado de la obra de Dios en nosotros. No es lo que hacemos externamente, sino quienes somos por dentro, lo que importa a Dios.


4 de noviembre de 2014

SECTARISMO


Charles E. Newbold Jr

La Babilonia espiritual se caracteriza por el sectarismo.
Después de que la gente de la tierra de Sinar se hubiera propuesto en su corazón edificar una ciudad, una torre, y un nombre para ellos mismos, el Señor bajó y dijo “descendamos y confundamos allí su lengua”. El lugar fue llamado Babilonia porque el Señor confundió su lengua y los esparció por todas las partes de la tierra. Gen. 11:2-9.

Puesto que esta Cosa que llamamos iglesia es de la carne y es un aspecto de la Babilonia espiritual, está bajo la misma maldición de confusión y sectarismo. Está fundada en el sectarismo, e incluso florece sobre ello. Promociona la desunión del cuerpo de Cristo. Su misma existencia depende de cómo cada sistema de iglesia difiere uno de otro. Esto se ve fácilmente en la forma en que sus nombres anuncian sus diferencias.

El sectarismo dice: “Yo soy de Pablo, Yo soy de Apolos”: Pablo acusó a los creyentes corintios de ser “carnales” y “meros hombres” por causa de su sectarismo. Había celos y contiendas en medio de ellos. Ponían su identidad en personalidades (Pablo, Apolos, Cefas) en lugar de ponerla en la persona de Jesucristo. Apolos y Pablo era ambos siervos del mismo Jesús.

Uno plantaba; el otro regaba; pero era Dios quien daba el crecimiento. El que planta y el que riega no es nada, sino que es Dios quien importa, porque El es el que da el crecimiento. Cuando entendemos que todos somos compañeros de obras, el campo de Dios, el edificio de Dios, entonces el sectarismo será quitado de en medio. La desunión en el cuerpo de Cristo se convierte en unidad, unicidad. Solo puede haber un fundamento, Jesucristo. Si lo que tenemos es sectario y contribuye a la desunión del cuerpo, ha sido edificado sobre el fundamento equivocado. 1ª Cor. 2.

Una vez que vemos esta verdad, no deberíamos tener necesidad ni de nombrarnos a nosotros mismos para poder identificar de lo que vamos. Todos estamos en los negocios del Padre, dejando que el Espíritu Santo que mora en nosotros nos edifique como el Templo del Espíritu Santo. “Si alguno destruyere el templo de Dios, Dios le destruirá a él, porque el templo de Dios, el cual sois vosotros, santo es”. 1ª Cor. 3:17. Cuanto más nos separamos del cuerpo de Cristo, más destruimos el templo del Espíritu Santo.

El Sistema de la Iglesia Ramera - Charles E. Newbold Jr

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"Consuelo para los que están en este mundo, pero que no son de este mundo, y por tanto, son odiados y están cansados de él, es que no estarán para siempre en el mundo, ni por mucho tiempo más"

Matthew Henry