Los Israelitas atravesaron el Jordán y se establecieron en la tierra prometida en su último campamento (Campamento No. 42) al final del éxodo, lo cual nos indica simbólicamente la libertad y conquista a la que esta llamada la iglesia al salir de la religión a una vida de libertad, en una relación directa, vital y real con Cristo Jesús; Cristo es símbolo de la tierra prometida y la herencia de los hijos de Dios.

La santidad es la obra del Espíritu Santo en nosotros, separándonos del amor del mundo. La santidad es un cambio de naturaleza desde dentro como resultado de la obra de Dios en nosotros. No es lo que hacemos externamente, sino quienes somos por dentro, lo que importa a Dios.


9 de julio de 2018

EL NACIMIENTO DE UN APOSTOL


Michael Clark, George Davis

Fue mientras que Saulo estuvo allí en Antioquía que otra gran transformación ocurrió en su vida y ministerio. Leamos el relato en su totalidad para ver los pasos finales del nacimiento de un apóstol:
Había entonces en la iglesia que estaba en Antioquía, profetas y maestros: Bernabé, Simón el que se llamaba Niger, Lucio de Cirene, Manaén el que se había criado junto con Herodes el tetrarca, y Saulo. Ministrando éstos al Señor, y ayunando, dijo el Espíritu Santo: Apartadme a Bernabé y a Saulo para la obra a que los he llamado. Entonces, habiendo ayunado y orado, les impusieron las manos Y LOS DESPIDIERON [dejar libres, dejar ir, dar de baja, no detener más]. Ellos, entonces, enviados por el Espíritu Santo, descendieron a Seleucia, y de allí navegaron a Chipre. Y llegados a Salamina, anunciaban la palabra de Dios en las sinagogas de los judíos. Tenían también a Juan de ayudante. Y habiendo atravesado toda la isla hasta Pafos, hallaron a cierto mago, falso profeta, judío, llamado Barjesús, que estaba con el procónsul Sergio Paulo, varón prudente. Este, llamando a Bernabé y a Saulo, deseaba oír la palabra de Dios. Pero les resistía Elimas, el mago (pues así se traduce su nombre), procurando apartar de la fe al procónsul. Entonces Saulo, que también es Pablo, LLENO DEL ESPÍRITU SANTO, fijando en él los ojos, dijo: ¡Oh, lleno de todo engaño y de toda maldad, hijo del diablo, enemigo de toda justicia! ¿No cesarás de trastornar los caminos rectos del Señor? Ahora, pues, he aquí la mano del Señor está contra ti, y serás ciego, y no verás el sol por algún tiempo.
E inmediatamente cayeron sobre él oscuridad y tinieblas; y andando alrededor, buscaba quien le condujese de la mano. Entonces el procónsul, viendo lo que había sucedido, creyó, maravillado de la doctrina del Señor. Habiendo zarpado de Pafos, Pablo y sus compañeros arribaron a Perge de Panfilia; pero Juan, apartándose de ellos, volvió a Jerusalén.
(Hch. 13:1-13)

Note la transición aquí. Todo empezó con una reunión de oración donde profetas y maestros, incluyendo Bernabé y Saulo, estaban ayunando y ministrando al Señor. Es de notar que en toda la larga lista de aquellos que asistieron a esta reunión, Saulo es mencionado el último. El que excedía a todos sus pares en la religión Judía estaba ahora último en la ekklesia de Dios.
Dios lo tenía exactamente donde quería. También, cuando Bernabé y Saulo son mencionados conjuntamente, Bernabé es mencionado primero.

Mientras ministraban al Señor, el Espíritu Santo habló una voz de separación, “APARTADME a Bernabé y a Saulo para MI…” Considere por un momento la verdadera naturaleza de esta separación. Este era un llamado que cortó toda conexión humana, un llamado a dejarlos ir, un llamado a ser puestos a un lado solamente POR y PARA el Espíritu de Dios. Era un llamado a ser llenado, guiado, y apoderado solamente por el Espíritu de Dios. ¡Algo estaba por cambiar! Antes de esto, Bernabé y Saulo no habían sido completamente SEPARADOS por el Espíritu para la obra. Ellos habían enseñado y predicado el evangelio en los días anteriores ¡pero algo estaba por suceder!
Que sepamos, Saulo no había realizado ningún milagro antes de esto. Nuevamente vemos a Saulo siendo separado, primero para el Espíritu Santo y luego para la obra. Luego, después de más ayunos y oraciones, impusieron manos sobre ellos y los dejaron ir.

¡Por favor óigannos! ¡Estos hermanos no fueron enviados por la iglesia; fueron enviados por el Espíritu Santo! Fueron guiados a salir. ¡Todo lo que fue requerido de los otros hermanos en esa reunión fue que LOS DEJEN IR!
Eso es exactamente lo que hicieron. Oraron y los impusieron manos y los dejaron ir. Ellos no los enviaron a nada. Ellos simplemente los dejaron libres para ser plenamente guiados por el Espíritu de Dios, para izar sus velas y para ser dirigidos por SUS vientos (Vea Juan 3:8).

Bernabé y Saulo navegaron a Pafos, donde conocieron a un mago y falso profeta llamado Barjesús, el cual les estorbaba de cualquier forma que podía. Note que Bernabé aquí todavía es mencionado antes que Saulo. Finalmente, en el versículo nueve, Saulo (que también es Pablo), LLENO DEL ESPÍRITU SANTO, pronunció ceguera sobre este “hijo del Diablo”, quien después de esto tuvo que ser guiado de la mano por una temporada. ¡Como resultado el procónsul estaba asombrado de la doctrina del Señor, y creyó!
En el versículo 13 leemos estas palabras fundamentales: “Habiendo zarpado de Pafos, Pablo y sus compañeros arribaron a Perge de Panfilia…” ¡Aleluya! ¡Saulo ha muerto! ¡Pablo ha nacido!

Ahora es “Pablo y sus compañeros”. Cuando el Rey Saúl era pequeño en sus propios ojos, Dios lo pudo usar. Así también aquí. Saulo de Tarso había crecido dentro de su nuevo nombre, Pablo – Paulus – pequeño o chico. El desierto había hecho su obra. Dios da gracia a los humildes y resiste a los soberbios. Aquí vemos algo dicho de Pablo que nunca antes había sido dicho de él: “LLENO DEL ESPÍRITU SANTO”. No hay dudas que en el pasado él había estado lleno de celo, pero ahora, habiendo sido completamente separado para el Espíritu, él estaba LLENO DEL ESPÍRITU y de poder. Como profetizó el profeta Zacarías: “No con ejército, ni con fuerza, sino con mi Espíritu, ha dicho Jehová de los ejércitos” (Zac. 4:6). El camino para arriba es hacia abajo, y el camino para abajo es hacia arriba. Como lo indica la vida de Pablo, la preparación para ser un apóstol primero consiste en un vaciamiento y lijado de la vieja vida de Saulo (Fil. 3:4-8) y luego de un llenado del Espíritu.
Ahora que hemos visto el nacimiento de un apóstol verdadero, vamos a compararlo con la red apostólica que está apareciendo en el centro del escenario, vitoreado por muchos en la cristiandad de estos días.

El sistema de la Iglesia Ramera - Michael Clark, George Davis

No hay comentarios.:

"Consuelo para los que están en este mundo, pero que no son de este mundo, y por tanto, son odiados y están cansados de él, es que no estarán para siempre en el mundo, ni por mucho tiempo más"

Matthew Henry