Los Israelitas atravesaron el Jordán y se establecieron en la tierra prometida en su último campamento (Campamento No. 42) al final del éxodo, lo cual nos indica simbólicamente la libertad y conquista a la que esta llamada la iglesia al salir de la religión a una vida de libertad, en una relación directa, vital y real con Cristo Jesús; Cristo es símbolo de la tierra prometida y la herencia de los hijos de Dios.

La santidad es la obra del Espíritu Santo en nosotros, separándonos del amor del mundo. La santidad es un cambio de naturaleza desde dentro como resultado de la obra de Dios en nosotros. No es lo que hacemos externamente, sino quienes somos por dentro, lo que importa a Dios.


29 de julio de 2018

INVIERNO... DORMIDO EN LA NIEVE


George H. Warnock

“Mientras la tierra permanezca, la siembra y la siega, el frío y el calor, el verano y el invierno, el día y la noche, nunca cesarán.” (Génesis 8:22)

Este fue el pacto de Dios con Noé cuando él y su familia salieron del arca. Dios había ordenado nuestras estaciones. En los siguientes capítulos quiero hablar sobre cada una de las estaciones por turno... siendo nuestro énfasis el tiempo de la cosecha, y lo que busca nuestro Labrador en el día de la cosecha. Y aunque hay muchos lugares en la tierra donde sólo se reconocen dos estaciones (algunos lugares quizás sólo una)... aquí, en el extremo norte dónde vivimos, siempre esperamos cuatro estaciones. Oficialmente nuestros inviernos se supone que empiezan sobre la tercera semana de Diciembre, y la primavera se supone que sigue después de la tercera semana de Marzo. Pero el invierno es un visitante que aparecerá antes de la fecha programada de Diciembre, un visitante que parece prolongar su estancia mucho más que la fecha programada de Marzo. Puede marcharse durante un tiempo corto cuando se le recuerda que ha llegado la “primavera”. Pero generalmente volverá a visitarnos varias veces durante los dos meses siguientes antes de marcharse del país... solo para decir “¡Hola... y Adiós!”. Pero sabemos que Dios ha ordenado las estaciones dondequiera que vivamos en este planeta; y Él nos ha hecho lo suficientemente duros para sobrevivir a los peores inviernos. No negando, por supuesto, que muchos de nuestros vecinos migrarán al profundo sur al acercarse Diciembre. “Pájaros invernales” es cómo les llaman los que viven en esos climas cálidos. Pero llega la primavera y nuestros “pájaros invernales” regresan para disfrutar de nuestros hermosos veranos aquí en el extremo norte. Así, consideraremos las estaciones como cuatro,... invierno, primavera, verano y otoño... y en ese orden porque Jesús dijo, “La cosecha es el fin del mundo.”

REDENCION, LA OBRA MAESTRA DE DIOS


George Warnock

En el corazón del artista o del músico o artífice—alguien con unos talentos creativos especiales—siempre hay ese deseo inherente de sacar adelante su obra maestra. Lo intenta una y otra vez, pero queda insatisfecho. Siempre hay ese persistente sentido de fracaso...”Todavía no lo he conseguido.... No estoy satisfecho. No puedo descansar hasta haber hecho lo mejor... ¡Y definitivamente no es esto!” Y aún así, no importa cuántas veces lo intente, generalmente termina con el sentimiento, “Podría haber sido mejor... Debo intentarlo de nuevo.”

Ahora bien, Dios es el Artista infinito, el Constructor y el Arquitecto de todas las cosas. A diferencia de los “jefes” de la tierra, Él no lo intenta una y otra y otra vez; pero con frecuencia parece que es así. Y al evolucionista le gustaría que nosotros imagináramos que es así como es. Podríamos tener la impresión de que Dios intentaba hacer a un hombre perfecto cuando Él hizo a Adán... y que después fracasó. Que intentara tener a una nación santa en Israel.... y que hubiera fracasado. Que intentara establecer un poderoso reino en David o Salomón,... y que hubiera fracasado. Pero no es así. En lugar de esto, Él estaba demostrando una y otra vez la futilidad del hombre, y la incapacidad del hombre de mantener el orden y la belleza en una creación caída. Pero debajo de todo esto se hallaba el hilo escarlata de la Redención, mientras esperaba con gran paciencia y longanimidad el día en que Él mismo intervendría y produciría la Obra maestra final de Sus manos creativas.

Así, tenemos la historia de la Redención. Es ahí donde Dios derramó todo lo que Él tenía en la obra creativa de Sus manos, y encontró descanso y deleite en un pueblo que Él creó para Su gloria, puesto que el apóstol Pablo nos dice que “Somos hechura Suya” (Efe. 2:10). Para producir nuestra Redención, Dios derramó todo lo que Él tenía, todo lo que Él es... para la redención de Su pueblo. Así que en realidad, “¡Somos Su Obra Maestra!” Le costó a Dios todo lo que Él tenía... hasta Su Hijo unigénito. Y nunca apreciaremos completamente la gloria de la Redención hasta que entendamos que ¡Fue el Dios Altísimo quién se revistió de carne, y se sometió al odio y a la mofa de Sus criaturas rebeldes para la redención y transformación de ellas! Y que fue en esta gran obra creativa que Él halló satisfacción completa, y pudo levantarse y decir, “Consumado es”. Él hizo esta declaración, primero desde la Cruz, y aún la ha de declarar de nuevo desde Su trono exaltado en los cielos (Juan 17:4, 19:30; Apoc. 10:7). Porque lo que consiguió en la Cruz ha de ser aún consumado en un pueblo hecho entero en Cristo, y conformado a Su imagen. La vieja creación podía manifestar sólo los rayos limitados de Su gloria. Se necesitaba la Nueva Creación para que Dios manifestara el completo esplendor de la Luz de Su gloria. Los redimidos de la raza de Adán han de ser aún revelados a las más supremas de sus criaturas celestiales, como Su obra de arte final y perfecta. ¡No es sorprendente que nos digan que los ángeles desean mirar a las cosas que pertenecen a nuestra salvación! (1ª Ped. 1:2).

 El huerto de Dios - George Warnock

28 de julio de 2018

LA ANTIGUA CREACION... LUGAR DE NUEVA SIEMBRA


George Warnock

Hemos enfatizado que Dios debe revelarse a Sí mismo a Su creación completamente, por causa de quién es Él. Fue con un propósito y un designio específico que Dios no aniquilara la vieja creación y comenzara a crear la nueva. Necesitaba ambas creaciones...la que cayó en futilidad, y la que Él levantaría a la vida y a la gloria. La vieja creación se convertiría en la tierra fértil donde Él dejaría caer la semilla que produciría la nueva. Lo viejo había de convertirse en el vientre, del que nacería una Nueva Creación. Y la vieja creación incluso ahora se encuentra atada a la corrupción y a la descomposición, con dolores de parto, clamando por la liberación que vendrá con “la manifestación de los hijos de Dios.” (Lee Romanos 8:19-21).

Podemos estar inclinados a mirar al fluir del amor de Dios en la Redención meramente como el remedio divino a la Caída. Cierto, es todo eso, y debemos alabarle por siempre por Su gloriosa Redención. Pero es mucho más que un remedio. Puesto que el plan de Redención precedía a la creación del hombre, y a la caída del hombre. Dios tenía un “propósito eterno” en cuanto a Sus escogidos, incluso “antes de la fundación del mundo” (Rom. 16:25; Efesios 1:4). Y en el Libro del Apocalipsis vemos al “Cordero que fue inmolado desde la fundación del Mundo.” (Apocalipsis 13:8). Dios vio apropiado usar la vieja creación y al hombre caído en particular, como el vaso por medio del cual Él revelaría la plenitud y la conclusión de Su gloria. ¿Cómo conoceremos la plenitud de la luz, si no hemos conocido la oscuridad? ¿Cómo conoceremos la plenitud de la paciencia y longanimidad de Dios a menos que Él se limite a Sí mismo, soportando dolorosamente todo el tiempo que dure el reinado del mal? ¿Cómo conoceremos las profundidades infinitas de Su amor, a no ser por la revelación de la Cruz, donde Dios colmó de Su misericordia y de Su compasión a rebeldes como tú y yo? Dios necesitaba Su plan infinito de Redención para una completa manifestación de Sus inescrutables atributos.

DIOS DEBE REVELARSE A SI MISMO


George Warnock

En el principio existía el Verbo, y el Verbo estaba con Dios, y el Verbo era Dios. Y el Verbo se hizo carne, y habitó entre nosotros, y vimos su gloria, gloria como del unigénito del Padre, lleno de gracia y de verdad.”(Juan 1:1,14). Porque Él es Dios, debe darse a conocer, debe revelarse. Él es Vida esencialmente, Vida inherente, y la Vida tiene que mostrarse viva. Esa Vida es Luz. La Luz tiene que brillar, porque la Luz se revela a sí misma. El Nombre de Dios habla de todo lo que Él es en la naturaleza de Su ser; pero la Palabra habla de este mismo Dios declarado y hablado. Así, leemos “Porque has engrandecido tu palabra conforme a todo tu nombre.” (Salmos 138:2). ¿Por qué está la Palabra por encima de Su nombre? Porque Dios es más glorioso en la expresión de Su ser que en recluirse a Sí mismo de Su creación. ¿Qué es una palabra, sino la declaración y la revelación de lo que hay en tu mente y corazón? Las palabras nos fallan muchas veces, por causa de nuestra incapacidad para decir claramente lo que queremos decir. Pero en Cristo el Logos, la Palabra, la expresión del corazón y el ser de Dios fue tan completa que el Verbo era Dios mismo, brillando en el rostro de Jesucristo:

25 de julio de 2018

EL LEGALISMO REQUIERE ALGO MAS


Charles E. Newbold Jr

La gente legalista requiere más de nosotros que Dios mismo. Vivimos cerca de unos Menonitas. Aunque sus casas están dispersadas en la comunidad, son una comunidad en sí mismos. Llevan ropas diferentes, viven ciertos códigos y adoran juntos en un edificio al que han dado nombre conforme a ellos mismos. Yo respeto mucho a esta gente. La simplicidad y la modestia de su estilo de vida es algo a desear. Sin embargo, tengo que preguntar, ¿Tengo que ser un  Menonita para ser cristiano? Si no, ¿Entonces para qué podría yo querer convertirme en un Menonita? ¿No es suficiente ser un creyente en Cristo Jesús bautizado? Pedro dijo a los presentes el día de Pentecostés, “Arrepentíos y bautícese cada uno de vosotros en el nombre de Jesucristo para perdón de los pecados, y recibiréis el don del Espíritu Santo.” Hechos 2:38. Ningún otro requisito se les demandó para tener lo que los doce tenían. Si yo no puedo ser cristiano sin ser Menonita, ¿Entonces que tengo que hacer para ser un Menonita? ¿Tengo que llevar la indumentaria, cumplir el código y asistir a cada reunión? ¿Hasta que punto puedo ser considerado un Menonita hecho y derecho?

A partir de la observación, parecería que tendría que hacer más para ser un Menonita, que para ser un católico-romano, episcopal, luterano, metodista, presbiteriano, bautista, pentecostal, carismático, miembro de la Iglesia de Cristo, o alguna otra iglesia independiente.

Sin embargo, en cada uno de estos grupos, tengo que “hacer” algo aparte de creer en Jesús para ser uno de estos—como mínimo, tendría que unirme a su iglesia. Se esperaría que yo me uniera a algo a lo que Jesús jamás me demandó que me uniera, algo que ni siquiera existía en los días del Nuevo Testamento—iglesia. Así pues, ¿Qué es esto a lo que quieren  que me una? ¿No es éste el grupo de la circuncisión, disfrazado?

El sistema de laiglesia Ramera - Charles E. Newbold Jr

LEGALISMO


Charles E. Newbold Jr

Los que gobiernan las iglesias son típicamente legalistas.
Técnicamente, el legalismo es la excesiva conformidad estricta, literal a la ley a un sistema religioso. Bob Hughey dice, “El legalismo es el sistema por medio del cual hacemos cosas para tratar de llegar a Dios.” “Es poner la confianza en la carne, en un intento de encontrar aceptación por parte de Dios.”

Pablo escribió a los creyentes de Filipo en referencia a esto y les dijo que se guardaran de los de la circuncisión (también llamados judaizantes), que enseñaban que “a menos que os circundéis conforme a la ley de Moisés, no podéis ser salvos.” Hechos 15:1. Hicieron de la circuncisión una pre-condición para ser cristiano. Pablo clarificó el tema con los Gálatas diciéndoles, “Nosotros somos la circuncisión, los que en espíritu servimos a Dios, y nos gloriamos en Cristo Jesús, no teniendo confianza en la carne.” Fil. 3:2-3. El grupo de la circuncisión ponía su confianza en la carne para encontrar aceptación de parte de Dios.

Podemos estar agradecidos por esta controversia que Pablo tuvo con los Judaizantes porque eso le inspiró a marcar una línea muy clara entre la gracia y el legalismo. Sin embargo, desafortunadamente, los que confían en la carne son todavía muchos entre nosotros. Casi siempre gobiernan las iglesias. Por tanto, esta línea divisoria entre la gracia y el legalismo tiene que seguir siendo trazada.

De todos los engaños perpetuados en el sistema de la iglesia, el legalismo es el más alarmante porque parece tan correcto, y sin embargo es tan erróneo. Las obras de la ley, o en términos más actuales, las leyes de la iglesia y de la obra de iglesia—se presentan como “el camino” a la salvación por encima de la obra de la gracia de Dios por medio de Jesucristo. Estas obras se convierten en sustitutos de Jesús.

El sistema de la iglesia Ramera - Charles E. Newbold Jr

24 de julio de 2018

FALSA SEGURIDAD DE SALVACION



Charles E. Newbold Jr

Las personas egoístas que gobiernan las iglesias dispensan una falsa seguridad de salvación.
A pesar del hecho de que los cristianos posean a las iglesias, muchos de los que pertenecen a ellas, son cristianos nominales solamente. Solo tienen una relación religiosa con Dios. Esta relación es en realidad con su religión y con su iglesia. Dios está distante de ellos. Asisten a estas cosas que llamamos iglesia porque les hacen sentirse justos. Han cumplido con su deber religioso. Esto les da una seguridad de salvación falsa. Los líderes de las iglesias fomentan este sentido de falsa seguridad de salvación haciendo que la gente sienta que todo está bien porque asisten y apoyan a su iglesia. Se les hace sentir culpables cuando no lo son.

Dennis Loewn me escribió lo siguiente:
Hace años escuché un cassette de Leonard Ravenhill. Mencionaba que había almorzado con un pastor que era uno de los líderes nacionales de la iglesia americana. Él le hizo le preguntó: “¿Cuándo comenzará la iglesia a ministrar la salvación que hay en Jesucristo?” El pastor contestó, “¡Nosotros estamos ministrando salvación!” Ravenhill no estaba de acuerdo. “No, estáis ministrando la seguridad de la salvación.”

Ravehill estaba en lo cierto. La “seguridad” está siendo dispensada semanalmente a cambio de una asistencia de una hora de duración y unos pocos dólares en el cepillo de la colecta. Esto, con mucho, es el principal producto que está siendo vendido en la iglesia de hoy día. Este es su pan y su mantequilla, y lo mejor es que nadie se meta con ello.

MENTALIDAD DE ACTUACION



Charles E. Newbold Jr

Muchos de las personas egoístas que gobiernan las iglesias han convertido sus iglesias y ministerios en centros de diversión, y buscan ministros que no son otra cosa que teatreros que mueven a las multitudes. Los auditorios de sus iglesias, diseñados a modo de teatros, y las congregaciones hambrientas de “entretenimiento”, demandan esta mentalidad de espectáculo.

El espectáculo” cristiano” es un gran negocio hoy día. Los ejecutivos egoístas y seculares de la así llamada industria musical “cristiana”, son impulsados por los fundamentos empresariales. Si aquello que llamamos “cristiano” se puede convertir en una industria, entonces no es lo verdadero. Los “artistas” cristianos” (los grandes son llamados “estrellas”) son el producto de esta industria motivada por el beneficio económico y a menudo son atraídos por la necesidad de popularidad, dinero y posiblemente ganar el anhelado “Dove Award”. Supongo que este premio es considerado cristiano por la paloma que simboliza al Espíritu Santo. ¿Para qué querrían un trofeo los así llamados “artistas” cristianos? ¿Para quién actúan? ¿Tienen una vitrina especial en casa donde mostrarlos? ¿Es su motivación de obtener fama y fortuna la misma que la de los artistas del mundo? ¿O es un sacrificio de alabanza al Señor sin ninguna búsqueda de ganancia personal?

Escritores, maestros bíblicos, personalidades de televisión, evangelistas: ¿Son vuestros esfuerzos completamente dedicados a servir al Señor, o dedicados al servicio del Yo? Si es para el Señor, entonces son inspirados por el Espíritu Santo. Si es para el servicio del Yo, entonces son motivados por la brujería.

El sistema de la iglesia Ramera - Charles E. Newbold Jr

HIPER-ACELERACION


Charles E. Newbold Jr

Las personas egoístas que gobiernan las iglesias a menudo aceleran las cosas para rodearse a sí mismos de una buena apariencia. La hiper-aceleración en este contexto consiste en intentar hacer que el Espíritu Santo “suceda” en la fuerza del yo. Lo que hacen los líderes para pretender la presencia de Dios es precisamente esa aceleración. Estos líderes tienen que hacer que sus reuniones ofrezcan la apariencia de que Dios se está moviendo en medio de ellas, tanto si lo está en realidad, como si no. Obviamente no lo está, por lo que sustituyen al Espíritu por una especie de hiper-aceleración. Intentan que sucedan cosas que no están sucediendo realmente, o intentan aparentar que están sucediendo cosas que en realidad no están sucediendo.

Esa hiper-aceleración es la práctica de la brujería. La vemos y la escuchamos en muchas reuniones de iglesias “carismáticas”, conferencias y convenciones en las que el líder de la alabanza y de la adoración prolonga la música que da energía durante una hora o más, pretendiendo que el Espíritu Santo está presente o deseando invocar Su presencia. Cuando el Espíritu Santo escoge no manifestarse a Sí mismo, la congregación puede ser intimidada por no cantar suficientemente fuerte, por no hacer palmas suficiente tiempo, por no orar suficiente, o por no danzar en el Espíritu con suficiente desenfreno. “Unid vuestras manos y dad al Señor una ofrenda de palmas.” “¡Que alguien me dé un amén!” Nos manipulan para hacer y decir cosas que no queremos hacer ni decir—cosas que no están en nuestro corazón el hacerlas o el decirlas. De cualquier forma lo falsificamos porque no queremos destacar en medio de la muchedumbre, o que piensen que somos rebeldes, ni tampoco ser acusados de apagar el Espíritu. Cuando falsificamos algo, nos convertimos en un fraude—fariseos.

Los que practican esta clase de hiper-aceleración, como la que a menudo vemos en la así llamada “televisión cristiana”, miden falsamente la presencia del Espíritu Santo por el volumen de la música, el fervor emocional de la audiencia, el elegante juego de piernas del predicador, la espontánea profusión religiosa de amenes de la muchedumbre, el número de personas que yacen caídas en el Espíritu—“pasando el rato en la alfombra”, tal y como ellos lo denominan. Algunos ministerios miran a estas cosas para validarse a sí mismos.

El sistema de la iglesia Ramera - Charles E. Newbold Jr

22 de julio de 2018

UN ADMINISTRADOR FIEL Y EQUILIBRADO


Virgilio Zaballos

     Una vez que hemos regresado a la casa, Dios tiene un propósito de colocarnos como administradores y mayordomos; pero para ello será necesario pasar la prueba de la fidelidad. El Señor de la casa pondrá a prueba nuestras vidas para ver si nos puede confiar Sus bienes. Dios se reserva el derecho de probar la calidad de nuestro corazón. Por tanto, somete a diversas pruebas a aquel que tiene un deseo sincero de servirle.
           
        Ejemplos
         Josué. Dios vio en Josué la fidelidad de su corazón cuando no participo en el culto al becerro de oro, sino que se mantenía al lado de Moisés y del tabernáculo. Y hablaba Jehová a Moisés cara a cara, como habla cualquiera a su compañero. Y él volvía al campamento; pero el joven Josué hijo de Nun, su servidor, nunca se apartaba de en medio del tabernáculo” (Ex.33:11). Y se confirmó cuando fue a reconocer la tierra prometida. Dios pudo comprobar que había en él otro espíritu... (Nm.14:6-10,24). Y Josué hijo de Nun y Caleb hijo de Jefone, que eran de los que habían reconocido la tierra, rompieron sus vestidos, y hablaron a toda la congregación de los hijos de Israel, diciendo: La tierra por donde pasamos para reconocerla, es tierra en gran manera buena. Si Jehová se agradare de nosotros, él nos llevará a esta tierra, y nos la entregará; tierra que fluye leche y miel. Por tanto, no seáis rebeldes contra Jehová, ni temáis al pueblo de esta tierra; porque nosotros los comeremos como pan; su amparo se ha apartado de ellos, y con nosotros está Jehová; no los temáis. Entonces toda la multitud habló de apedrearlos... Pero a mi siervo Caleb, por cuanto hubo en él otro espíritu, y decidió ir en pos de mí, yo le meteré en la tierra donde entró, y su descendencia la tendrá en posesión”.

TRES PARABOLAS Y UN MISMO MENSAJE



Virgilio Zaballos

En el capitulo quince del evangelio de Lucas encontramos tres parábolas que nos enseñan estas grandes verdades. Las tres forman parte de un mismo mensaje, y las tres tienen elementos comunes que amplían su contenido. Estas tres parábolas de Jesús son:
         
·         La oveja perdida ( Lc.15:1 -7)
·         La  moneda perdida Lc.15:8- 10)
·         El hijo pródigo -perdido- (Lc.15:11-32)

Veamos un resumen de las verdades que encierran intercalando sus contenidos.

PERDIDOS Y MUERTOS.
La oveja se perdió, la moneda también; y el hijo desperdicio sus bienes, vivió perdidamente, lo malgasto todo y fue contado por muerto (Lc.15:4,8,13,14,24).
Todos nosotros nos perdimos y descarriamos por el pecado (Is.53:6); fuimos apartados de la gloria de Dios (Ro.3:23); y morimos espiritualmente en delitos y pecados (Ef.2:1-3).

HALLADOS, ENCONTRADOS Y REVIVIDOS.
La oveja fue encontrada por la iniciativa del pastor de ir a buscarla (Lc.15:4,5 y 19:10).
La moneda fue hallada por la mujer que encendió la lámpara (figura de la palabra de Dios Sal.119:105), barrio su casa (figura del perdón por la sangre) y buscó diligentemente (la obra del Espíritu Santo) hasta encontrarla (Lc.15:8).
El hijo fue hallado y revivido (figura del nuevo nacimiento) cuando volviendo en sí decidió arrepentirse y le puso obras al arrepentimiento. “Y volviendo en sí, dijo... me levantaré e iré a mi padre, y le diré: Padre, he pecado contra el cielo y contra ti. Ya no soy digno de ser llamado tu hijo; hazme como a uno  de tus jornaleros. Y levantándose, vino a su padre”.

RECUPERAR EL PUNTO DE PARTIDA



Virgilio Zaballos

El equilibrio se recupera cuando se encuentra lo que se había perdido. Regresar  al Dueño es el punto inicial de partida para volver a encontrar la estabilidad como seres humanos. El pecado, que fue introducido en el mundo por el hombre, ha traído desorden y sufrimiento a la creación entera (Ro.5:12). La creación de Dios está gimiendo para regresar al antiguo orden de cosas.

Porque el anhelo ardiente de la creación es el aguardar la manifestación de los hijos de Dios. Porque la creación fue sujetada a vanidad, no por su propia voluntad, sino por causa del que la sujetó en esperanza; porque también la creación misma será libertada de la esclavitud de corrupción, a la libertad gloriosa de los hijos de Dios. Porque sabemos que toda la creación gime a una, y a una está con dolores de parto hasta ahora; y no sólo ella, sino que también nosotros mismos, que tenemos las primicias del Espíritu, nosotros también gemimos dentro de nosotros mismos, esperando la adopción, la redención de nuestro cuerpo” (Ro.8:19-23).

La restauración del orden creacional comienza por la obediencia de un hombre, Jesucristo (Ro.5:19).
Y esa restauración continúa con cada ser humano que regresa a Dios a través de Jesús (Hch.3:21).
Cada hombre encontrado por Dios es un eslabón mas para la restauración de todas las cosas. De ahí que haya gozo en el cielo y en la tierra con cada pecador que se arrepiente (Lc.15:5,6,7,9,10,23,24,32).
Dios ha levantado UNA SEÑAL muy alta para que todos puedan verla: La cruz, muerte, resurrección y exaltación de Jesús a la diestra del Padre (Jn .3:14-16 y 12:32) ( Fil.2:5-11).
Jesús mismo dijo: Porque el Hijo del Hombre vino a buscar y a salvar lo que se había perdido (Lc.19:10).

El milagro de una Vida Equilibrada - Virgilio Zaballos

EL RECORRIDO DE UN LLAMAMIENTO EQUILIBRADO



Virgilio Zaballos

El apóstol Pablo dijo “Corred de tal manera que lo obtengáis”. Y el autor de los Hebreos escribe: “Corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante”. El llamamiento de Dios es una carrera larga, para toda la vida, y hasta la eternidad. Por lo tanto, precisa de una estrategia diseñada a largo plazo, con etapas intermedias a corto y medio plazo. Veamos la enseñanza del Maestro sobre el llamamiento equilibrado en Lucas 14:25-33).

Grandes multitudes iban con él; y volviéndose, les dijo: Si alguno viene a mí, y no aborrece a su padre, y madre, y mujer, e hijos, y hermanos, y hermanas, y aun también su propia vida, no puede ser mi discípulo. Y el que no lleva su cruz y viene en pos de mí, no puede ser mi discípulo. Porque ¿quién de vosotros, queriendo edificar una torre, no se sienta primero y calcula los gastos, a ver si tiene lo que necesita para acabarla? No sea que después que haya puesto el cimiento, y no pueda acabarla, todos los que lo vean comiencen a hacer burla de él, diciendo: Este hombre comenzó a edificar, y no pudo acabar. ¿O qué rey, al marchar a la guerra contra otro rey, no se sienta primero y considera si puede hacer frente con diez mil al que viene contra él con veinte mil? Y si no puede, cuando el otro está todavía lejos, le envía una embajada y le pide condiciones de paz. Así, pues, cualquiera de vosotros que no renuncia a todo lo que posee, no puede ser mi discípulo

EL LLAMAMIENTO EN EQUILIBRIO


Virgilio Zaballos

El llamamiento procede de Dios; no se puede conseguir porque esté de moda, sea atractivo aparentemente, o porque te envuelva la emoción de un culto ferviente con un predicador fogoso. El llamamiento al discipulado cristiano viene después de haber OIDO Su voz en nuestros corazones, y haber DIGERIDO Su palabra. Entonces debe venir una respuesta firme de la voluntad libre del hombre. Las respuestas rápidas sin haber asimilado y digerido Su palabra, producen un comienzo espectacular que impresiona a la carne, pero que aterriza en picado.

En Lucas 9:57-62 encontramos a tres personas que querían pero no sabían lo que significaba el llamamiento de Cristo. Cada uno de ellos tenía un motivo personal para desplazar el llamado del Maestro a un segundo lugar. En el primero eran las comodidades de un hogar establecido; de ahí que Jesús le respondiera: “Las zorras tienen guaridas, y las aves del cielo nidos; mas el Hijo del Hombre no tiene donde recostar la cabeza”.

 El segundo estaba anclado en las tradiciones familiares (esperar a que el padre falleciera), Jesús le dijo: “Deja que los muertos entierren a sus muertos, y tú ve, y anuncia el reino de Dios“. Por su parte el tercero vivía atrapado en los esquemas sociales de quedar bien con la familia: “déjame que me despida primero de los que están en mi casa”. Jesús le respondió: “Ninguno que poniendo su mano en el arado mira hacia atrás, es apto para el reino de Dios”

Las condiciones para seguir al Maestro las pone él. Nosotros sólo las aceptamos o rechazamos. No son condiciones para negociarlas, argumentarlas o cambiarlas. Decir “si” al llamamiento de Dios es un compromiso de “por vida”. Toda nuestra vida está metida en ello. El Señor no permitirá el juego de la margarita: Te quiero, no te quiero; te sirvo, no te sirvo. Por ello, es necesario tomar una decisión equilibrada, recorriendo cada uno de los pasos necesarios hasta alcanzar la meta del llamamiento divino. La respuesta puede ser instantánea (como en el caso de Andrés, Pedro y otros), pero esa decisión fue probada y confirmada durante mas de tres años andando con el Señor.
Nuestro “si” inicial nos introduce a la fase de entrenamiento activo, que a su vez nos lleva al tiempo de dar fruto duradero. Estamos hablando del llamamiento general para cada cristiano, luego ese camino tiene diferentes servicios y funciones especificas a las que el Señor llama individualmente.

El milagro de una Vida Equilibrada - Virgilio Zaballos

21 de julio de 2018

CANTICO DE ALABANZA A LA CREACION



George Warnock

El profeta Isaías fue atrapado en el Espíritu y dijo, “Santo, Santo, Santo, es el SEÑOR de los ejércitos, llena está toda la tierra de su gloria.” (Isaías 6:3). Y el Salmista llama a toda la creación a mostrar las excelencias de Su Creador:

Alabe la creación al SEÑOR
¡
Aleluya!
Alabad al SEÑOR desde los cielos; Alabadle en las alturas.
Alabadle, todos sus ángeles; Alabadle, todos sus ejércitos.
Alabadle, sol y luna; Alabadle, todas las estrellas luminosas.
Alabadle, cielos de los cielos, Y las aguas que están sobre los cielos.
Alaben ellos el nombre del SEÑOR, Pues El ordenó y fueron creados;
Los estableció eternamente y para siempre, Les dio ley que no pasará.
Alabad al SEÑOR desde la tierra, Monstruos marinos y todos los abismos;
Fuego y granizo, nieve y bruma; Viento tempestuoso que cumple su palabra;
Los montes y todas las colinas; Árboles frutales y todos los cedros;
Las fieras y todo el ganado; Reptiles y aves que vuelan;
Reyes de la tierra y todos los pueblos; Príncipes y todos los jueces de la tierra;
Jóvenes y también doncellas; Los ancianos junto con los niños.
Alaben ellos el nombre del SEÑOR, Porque sólo su nombre es exaltado;
S
u gloria es sobre tierra y cielos.

(Salmos 148:1-13)

LAS COSAS INVENCIBLES DE DIOS


George Warnock

Porque desde la creación del mundo, sus atributos invisibles, su eterno poder y divinidad, se han visto con toda claridad, siendo entendidos por medio de lo creado.” (Rom. 1:20).

¡Qué cosa tremenda es ésta! Que en cada cosa que Dios hizo tenemos una expresión de algún aspecto particular de la gloria y la sabiduría de Dios—para que el hombre pueda ver y oír y llegar a conocer a Dios. Y hasta que los corazones de los hombres se oscurecieran completamente por medio del pecado voluntario y de la desobediencia; lo que Dios creó se convirtió en la Palabra de Dios para ellos. Fue la única Biblia que los hombres tenían en esos principios tempranos. El apóstol nos dice como el hombre perdió su capacidad para conocer a Dios: “Pues aunque conocían a Dios, no le honraron como a Dios ni le dieron gracias, sino que se hicieron vanos en sus razonamientos y su necio corazón fue entenebrecido.” (Romanos 1:21). Esto inició al hombre en su largo camino a la apostasía, del que nunca se ha repuesto. En lugar de adorar a Dios, comenzaron a adorar a las cosas que Él había creado. En lugar de darle gracias por las cosas hermosas que Él había dado, comenzaron a adorar a las cosas hermosas. Hicieron mucho con los dones que Él había dado, pero deshonraron al Dador. Y esto es tan evidente en las así llamadas naciones cristianas como lo es entre las paganas. Cuando cualquier cosa que Dios haya hecho se interpone entre el hombre y su Creador, es idolatría. El materialismo es idolatría. El Humanismo es idolatría. Adular a algún don grandioso o a algún ministro con talentos que Dios haya puesto en la iglesia para edificar el cuerpo de Cristo, es idolatría.

TIEMPOS Y ESTACIONES.


George Warnock

En este escrito vamos a enfatizar el aspecto del labrador en Su manifestación. A todos los cristianos evangélicos se les asegura que este es el tiempo de la cosecha. Y vamos a hablar del Huerto de Dios particularmente como lo vemos en el tiempo de la cosecha. Él quiere que comprendamos claramente lo que Él persigue cuando entra en Su huerto en el tiempo de la cosecha. Si visita Su huerto en invierno, Él no espera ver mucho en el camino de la vida. Sin embargo, Él nos anima a caminar en fidelidad, a tiempo y fuera de tiempo. Nos animaría a tener esperanza. Nos recordaría que el invierno es una promesa de la primavera y de la vida nueva. Cuando viene en primavera, las aguas comienzan a fluir y nos gozamos con el sentir de Su bendición. Dios se deleita en bendecir a Su pueblo. ¡Es primavera! Los largos y tristes días del invierno han pasado, y la expectativa de la nueva vida está presente por todas partes. Cuando viene en el verano, hay calor y sequedad; pero mezclado aquí y allí, da lluvias de bendición y mucho sol; porque sabe que esto es lo que se necesita para la madurez. Pero cuando viene en el tiempo de la cosecha, Él busca sólo una cosa, una sola cosa. Busca el “precioso fruto de la tierra”. Y porque estoy seguro de que éste es el tiempo de la cosecha, creo que Dios quiere enfatizar lo que Él busca en el tiempo de la cosecha, no sea que nos desanimemos o quedemos perplejos por causa de nuestra sequedad. Él sabe todo eso porque es Él quién lo causó.

¡El lo causó! ¿Por qué? Porque quiere producir buen fruto en Su huerto. Y aunque reconocemos que hay diferentes estaciones que experimentamos en nuestras vidas personales, creemos que ahora es tiempo de cosecha históricamente en lo que concierne al cuerpo colectivo de Cristo.

¿QUÉ ESTÁ DIOS BUSCANDO?


George Warnock

Si supiéramos lo que Dios busca y lo que Él espera, descartaríamos todas esas teorías y fechas sobre la venida del Señor. Si supiéramos de cierto que el Señor Jesús está en Su trono de gloria, intercediendo por Su pueblo para llevarlos a plenitud de la intención de Dios... entonces estaríamos más preocupados de que Su intención se cumpliera que en especular sobre cuando Él va a regresar. ¿Qué es lo que Él espera? ¿Para qué regresa? ¿Qué está haciendo al respecto ahora mismo? Está esperando a una familia de hijos e hijas a Su imagen y semejanza. Está preparando un ejército que vencerá “por la sangre del Cordero, y por la palabra de su testimonio” (Apoc. 12:11). Está edificando una morada para Él mismo, un edificio hecho de “piedras vivas”, un templo “no hecho de manos”. Ha encontrado una “perla de gran precio”, una perla que está formada a partir de un mero grano de arena, pero transformado en una gema, por medio de una gracia maravillosa.

Porque es el Espíritu de Dios el que toma las virtudes del Cristo viviente y las manifiesta en Su Iglesia para producir esa gema preciosa. Él está limpiando para sí a una Iglesia, “una Iglesia gloriosa, sin que tenga mancha ni arruga ni cosa semejante...” ¿Cómo? “Por el lavamiento del agua por la Palabra” (Efesios 5:26). Busca a una novia santa, y Juan la vio en visión profética “que descendía del cielo, de Dios, preparada como una novia ataviada para su esposo.” (Apoc. 21:2, lee 2ª Cor. 11:2). Busca fruto de la viña que plantó en la tierra, porque Jesús dijo, “Yo soy la vid, vosotros los pámpanos, el que permanece en Mí y Yo en él, ese lleva mucho fruto”. (Juan 15:5). Porque Dios no es sólo Arquitecto, Constructor, y Artífice... También es el Esposo y el Labrador. Y así, nos dice, “Estoy esperando el precioso fruto de la tierra.” Está esperando algo que será el cumplimiento del deseo de Su corazón, Su Iglesia santa, Su esposa sin mancha, Su perla de gran precio, Su fruto precioso. Y mientras Él espera eso, Él está preparando diligentemente a Su pueblo para “alabanza de Su gloria”. Y porque espera eso pacientemente, nos exhorta... “Sed también vosotros pacientes; fortaleced vuestros corazones, porque la venida del Señor está cerca” (Santiago 5:8).

El Huerto de Dios - George H. Warnock

VEN A MI HUERTO


George Warnock

Venga mi amado a su huerto, Y coma de su dulce fruta.” (Cantar de Los Cantares 4:16) “Yo vine á mi huerto, oh hermana, esposa mía” (Cantar de los Cantares 5:1)

Toda la tierra está llena de Su gloria”, dijo el profeta, y en esta hora de clamor y bullicio, cuando miles de voces conflictivas invaden nuestros corazones y mentes para distraernos o para distorsionar nuestra vista, nos haría bien a todos apartarnos para escuchar una palabra del libro de la naturaleza... la creación de Dios. Pero siempre, por supuesto, en el contexto de la Biblia, el libro de la Nueva Creación. Porque la Biblia nos enseña que el “campo” donde se planta la semilla de la Nueva Creación es el mundo que ahora está bajo la maldición. “El campo es el mundo”, dijo Jesús (Mat. 13:38). Qué maravilloso saber que la vieja creación se ha convertido en el campo de semillas de la Nueva Creación, y que Dios es el creador de ambas; por supuesto, reconociendo que la vieja creación se sujetó a futilidad por causa de la caída del hombre. Y así, aquí mismo en medio de la vieja creación, Dios puede hablarnos desde ese entorno. Jesús nos dijo: “Observad cómo crecen los lirios del campo” (Mat. 6:28); Y también, “Yo soy la vid, vosotros los pámpanos...” (Juan 15:5). A través de estas cosas naturales Dios nos apunta hacia la realidad, a la Nueva Creación...y a través de todo ello nos revela algo glorioso desde el Espíritu de la Verdad.

20 de julio de 2018

POSESIVIDAD Y PROPIEDAD


Charles E. Newbold Jr

La gente egoísta que gobierna las iglesias es típicamente posesiva y reclama la propiedad sobre sus votantes. Si son tus dueños, pueden controlarte. Si no pueden controlarte, renegarán de ti.

La membresía en las iglesias es una reclamación de propiedad que las iglesias han establecido sobre un número de personas. Todas las iglesias y denominaciones lo hacen. Elige a cualquiera. En 1997, la convención bautista del sur informó de 15.891.514 miembros y 40.887 iglesias. {22}  ¿Por qué tenemos que saber cuántas personas nos pertenecen? ¿Por qué tenemos que saber cuántas personas asistieron a la escuela dominical y al culto de adoración? ¿Por qué es importante comparar esta cifra con “la misma fecha del año pasado? ¿Para quién estamos contando? Contamos porque medimos nuestro éxito con los números.

Me encontraba en una reunión de recién convertido y decidí contar la asistencia. Una voz suave y silenciosa en mi espíritu me interrumpió y me dijo, “No cuentes. Tú no sabes quién cuenta.” Descubrí a tiempo lo cierto que esto era, con el ir y venir de gente. Además, ¿No estamos contando a la cizaña junto con el trigo? Jesús nos dijo que la cizaña y el trigo crecen juntos. Mat. 13:24-30. No siempre sabemos quienes son. Si tenemos que contar narices y saber que estamos incluyendo a la cizaña en esa cifra, entonces tenemos que saber que no estamos contando como Dios cuenta. Estamos contando algo para el Yo.
Quizá, contamos para determinar lo fuertes que somos. La Biblia registra tres veces en las que se tomó un censo de Israel. Las primeras dos veces, Dios lo había ordenado. Dios había mandado a Moisés que censara a toda la congregación de los hijos de Israel a partir de los veinte años de edad, numerando a sus ejércitos. Num. 1. La segunda vez, el Señor le dijo a Moisés y a Eleazar que hicieran el censo de “toda la congregación de los hijos de Israel de veinte años arriba, por las casas de sus padres, todos los que pueden salir a la guerra en Israel.”

ADULACION


Charles E. Newbold Jr

La gente egoísta que gobierna las iglesias a menudo adula a sus candidatos para ganarlos. “Vosotros dos tenéis tanto qué ofrecer. Es una lástima que no estéis involucrados en una iglesia en algún sitio.” Ese argumento lo han usado con mi esposa y conmigo unas pocas veces. Nos decían que éramos la pareja ideal en una iglesia a la que asistimos. Creo que la intención era adularnos, pero no nos aduló.

La adulación es tentadora, seductora y engañosa. Cuando no vemos lo que nos está sucediendo, somos atrapados por ello. Tiene el motivo engañoso de alabarnos para ganar nuestro favor. Un verdadero cumplido no tiene un motivo oculto, pero los que adulan, están tratando de sacar algo de nosotros para ellos, con su actitud encantadora. Son como la mujer adúltera de Proverbios 7:4-5, que caza a los creyentes que carecen de discernimiento. “Di a la sabiduría, tu eres mi hermana, y  a la inteligencia llama parienta, para que te guarden de la mujer extraña (adúltera), y de la extraña que ablanda sus palabras.”

La adulación es un llamado a la carne buscando grandeza, esplendor, placer sensual, éxito y riquezas—todas ellas relacionadas con cosas del mundo.

 El Sistema de la Iglesia Ramera - Charles E. Newbold Jr

IRA Y COLERA


Charles E. Newbold Jr

Algunas de estas personas aprovechadas que gobiernan las iglesias pueden ser adictas inseguras al control, que necesitan mantener una sentido del orden en sus vidas para sentirse seguras. Pueden ser perfeccionistas que imponen su standard de perfección sobre los demás. Cuando las demás no cumplen los estándares de estas personas, se sienten frustradas y se encolerizan. La ira es parte de su arsenal de armas para manipular a las demás personas a su conformidad. El pastor Daniel era uno de ellos.

La iglesia del Pastor Daniel—y enfatizo que era “su” iglesia—servía como escaparate para su tendencia a actuar. Era un orador consumado, un ávido lector, y una personalidad cautivadora. Su aspecto era exquisito y su puesta en escena era muy profesional. Atraía a las masas y multiplicaba los miembros, pero no podía mantenerlos. “¿Por qué la gente se marcha por la puerta de atrás tan rápido como entran por la puerta principal?”, preguntaba.

No quería escuchar la verdad. Quería que fuera la culpa de “ellos”; no la suya. La gente se iba por el uso incorrecto de la autoridad. Era abusivo espiritual y emocionalmente. Después de todo, era “su” iglesia y nadie tenía permiso para hacer nada a menos que fuera invitado a hacerlo. Su iglesia era su teatro, su púlpito el escenario, y él era la obra. Los que tuvieran el mínimo pensamiento de contradecirle, especialmente si habían recibido una posición de liderazgo, se volvían sospechosos. Tenían que ser tratados, normalmente con un fuerte ataque verbal.

Dejar su iglesia no era una opción agradable. Los que lo intentaban, a menudo eran amenazados con el pensamiento de que se saldrían de la voluntad de Dios, y les sucederían cosas terribles. La lealtad de muchos en su membresía se basaba en el temor y en la intimidación.

Su esposa Jezabel alimentaba sus fervientes manipulaciones con las suyas propias. Gobernaba furtivamente detrás del trono de él. La mayoría lo sabía, pero nadie se atrevía a hablar una palabra. “¡Calla!” era la norma operativa en esta familia disfuncional extendida llamada iglesia.

El Sistema de la Iglesia Ramera - Charles E. Newbold Jr

RECLAMACIONES DE DINERO


Charles E. Newbold Jr

Las personas egoístas que gobiernan las iglesias dependen de otros para hacerse a sí mismas prósperas, así como a sus iglesias. “Socios”  o miembros ingenuos y confiados son engañados para llegar a creer que al dar a estos ministerios o iglesias gobernadas por personas con planes personales, están en realidad dando “como para el Señor”. Estos ministerios con frecuencia hacen sentir culpables a los que no dan tanto como escojan dar libremente. Hacen extractos de los diezmos y de las ofrendas de sus votantes, engañándoles al hacerles creer que están “sembrando” en el Reino de Dios, cuando en realidad, están potenciando reinos de hombres.

Atraen las emociones de sus partidarios para persuadirles a dar a su ministerio o iglesia. Si son personalidades televisivas, pueden prometer el envío de un regalo a sus partidarios, a cambio de una donación: libros, Cds, paños de sanidad, aceite para la unción de Israel, o alguna otra cosa.

Sus circulares son diseñadas profesional y cuidadosamente para tocar las fibras sensibles del corazón de los donantes, manipulándoles para dar dinero.

Enseñan falsamente que sus iglesias son los almacenes de aquellos miembros que “pertenecen” a ellas. Muchos de ellos acumulan riquezas y las derraman sobre sí mismos en la construcción, mantenimiento y preservación de sus organizaciones e instituciones, mientras que los pobres de todo el mundo siguen sin alimentos, sin ropa, sin cobijo, y sin el evangelio de Reino de Dios. Jesús jamás sugirió ni por asomo que “al edificar vuestros edificios, y preservar vuestras instituciones, lo hacéis a Mí”. Más bien dijo que si alimentamos a los hambrientos, damos de beber a los extraños, vestimos a los que están desnudos, visitamos a los enfermos y a los que están en la cárcel, vamos a hacer todas estas cosas a Él. Mateo 25:35-40.

El Sistema de la Iglesia Ramera - Charles E. Newbold Jr

"Consuelo para los que están en este mundo, pero que no son de este mundo, y por tanto, son odiados y están cansados de él, es que no estarán para siempre en el mundo, ni por mucho tiempo más"

Matthew Henry